Vuelos a Japón
En el pasado Osaka fue la capital de Japón. Hoy en día ese título le corresponde a Tokio, pero Osaka continúa siendo la tercera ciudad de Japón. Cuando no esté contemplando con asombro los cerezos en flor que rodean el castillo de Osaka o paseando entre los jardines de los taisha (santuarios) Sumiyoshi, de siglos de antigüedad, no le resultará difícil perderse en actividades más modernas, como compras en Shinsaibashi o ir a los clubes de Namba.
Y no hay que olvidarse de Dotonbori, el corazón de Osaka, con suficientes luces de neón para rivalizar con Times Square o Piccadilly Circus.
Sin embargo, quizá más que en cualquier otra ciudad japonesa, Osaka es un destino para los amantes de la cocina. La llaman la "cocina de la nación". Aquí, por lo general, el comer se resume con el concepto de kuidaore, que significa "comer hasta ir a la quiebra".
No hace falta decir que las gentes de Osaka aprecian una buena comida y que tendrá numerosas opciones para comprobarlo. Los pequeños establecimientos a pie de calle son especialmente una parte esencial de la experiencia en Osaka. No debería marchar de aquí sin probar takoyaki (bolas de harina rellenas de pulpo) o okonomiyaki (un sabroso crep relleno de verduras y carne) en alguno de los puestos callejeros.
Más acogedores y agradables incluso que los restaurantes son los habitantes de Osaka. Los residentes son muy hospitalarios. Con una población de casi tres millones, Osaka mantiene el aire de una pequeña y agradable ciudad de provincia. Descubrirá que a los lugareños les encanta charlar y hacer sugerencias de viaje.