Vuelos a Asia y el Pacífico
Esta cadena de 115 islas en el océano Índico cuenta con todo lo que cabe esperar: un clima perfecto, magníficas playas y un brillante océano azul con una rica vida marina. Añada a esta mezcla la abundancia de hoteles de lujo de cinco estrellas y prepárese para las vacaciones más tranquilas entre hermosas bahías y vistas perfectas.
Pero, ¿dónde quedarse en las Seychelles? Tan solo 15 islas están habitadas. La mayoría de los visitarse suele decantarse por tres: Mahé, Praslin y La Digue. Mahé es la mayor. Su capital, Victoria, es el mejor lugar donde aprender la cultura local. El Museo de Historia Nacional es diminuto, pero lleno de información sobre la música, las costumbres y supersticiones locales, y, por supuesto, la preciada planta nacional, el coco de mar.
Pero, ¿por qué pasar tiempo dentro cuando puede explorar su propio paraíso personal? Cuando haya acabado de pasear por Victoria, cosa que no le llevará demasiado, piense en explorar un bosque. El parque nacional Morne Seychellois es una vasta reserva natural. Si alcanza su cumbre más alta (905 metros por encima del nivel del mar), será recompensado con unas magníficas vistas de la isla.
Con todo, el mayor atractivo de las Seychelles son sus playas. No hay un solo tramo de costa que no sea precioso, pero Petite Anse Bay es más especial si cabe: piense en arena suave y blanca y en aguas aguamarinas, todo ello enmarcado en un entorno de verdes colinas de granito. También es un destino ideal para practicar esnórquel y buceo. En algunos lugares podrá practicar esnórquel en la misma playa y descubrir corales.
Si tiene tiempo para aventurarse un poco más lejos, llegar a Praslin es fácil. No solo se encuentra aquí la hermosa playa Cote d'Or, sino también Vallée de Mai, la reserva natural de la isla, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su antigüedad se estima en millones de años. Little La Digue bien merece una visita asimismo. No hay coches en la isla, lo que la convierten en la más tranquila de las tres.